Hotel Balneario Fuentes del Trampal

Merece la pena. Las instalaciones de los tratamientos de aguas son sobresalientes. La piscina dinámica es amplia y con los aparatos necesarios (camas, sillas, chorros a presion, jacuzzi de burbujas. El jacuzzi de aguas ferroginosas procedentes del rio Trampal es algo muy curioso y tiene una larga historia. Todo muy limpio y bien organizado. La comida es casera, abundante y de calidad. El entorno, la dehesa extremeña, ofrece una sensación de calma extraordinaria por su silencio. Las habitaciones son espartanas, pero bien limpias. Solo se echa en falta el que los televisores fuesen mas grandes y funcionen bien. (pantallas minúsculas a dos metros de altura y a cuatro metros de distancia de los cabeceros de las camas.....(para personas que casi todas son de la tercera edad...,,, para verlos con prismáticos), Lo que está bien es que haya un pequeño refrigerador y un aparato de aire acondicionado que se regula correctamente. Y el personal, todos muy amables y atentos.

Instalaciones no están mal. El personal, que hacen de todo, o sea tanto cocina, limpian y atienden en los baños termales, etc.... estupendas. La comida, hubo que poner una reclamación porque era incomible, lentejas POR LA NOCHE, duras, pescado sin carne... ensaladas o verduras inexistentes. No puedes repetir café, una sola taza y ya...La dueña... de mala empresaria a rácana y desagradable

Descubrí el balneario Fuentes del Trampal hace un par de años aunque sabía de su existencia y desde entonces voy con bastante frecuencia y seguiré yendo. A tan sólo 23 km. de Montánchez se encuentra este magnífico lugar rodeado de montañas en un enclave único, rodeado de naturaleza donde se puede palpar el aroma de la dehesa extremeña. El lugar perfecto para quien quiera desconectar y pasar una estancia tranquila así como pasear por las inmediaciones del lugar donde existe una pista que invita a tal fin. Las instalaciones del balneario son extraordinarias tanto interiores como exteriores. El circuito termal es una maravilla y sobre todo " esa piscina dinámica ". La comida es casera, muy buena y abundante servida por un personal muy atento y responsable. Las habitaciones son grandes y muy limpias con un buen baño. La zona de jardines es es fantástica con mucha zona de césped muy bien cuidado y con mucha sombra. Destacar también la zona de la piscina exterior muy bien situada con sus hamacas y sombrillas y un agua cristalina. MUY MUY RECOMENDABLE.

CALIDAD/PRECIO DE RISA Comenzamos por la habitación, cutre para el precio, el secador estropeado, sin una basura donde tirar desechos, las almohadas finas, la ropa de cama incómoda, las toallas del cuarto de baño, sólo 2 y tamaño cabeza, un solo rollo de papel higiénico. Bajamos a la piscina, las tumbonas rotas y la zona de césped que decir, sin zona de sombra, solo 4 sombrillas y ocupadas, la piscina exterior enana, la de 6 patas de casa de mis padres es más grande, no esperéis poder nadar. Nada señalizado, ni en los pasillos de las habitaciones ni en el exterior. Salida de la habitación a las 11 de la mañana, de risa y cuando salimos apuradas no está la gerente y nos dicen que tenemos que esperar que está desayunando, de risa Y para colmo sabemos que nos hemos dejado en el suelo enfriando la plancha del pelo allí, pero nadie sabe dónde está. Debería darle vergüenza al dueño o dueña cobrar 70€ por una habitación que no vale ni 20€, hemos estado en hostales con más clase. EL TRAMPAL, TRAMPA LA QUE HACEN A TI

Un trato estupendo. La persona que nos ha dado el masaje es muy bueno, se nota que sabe bien de la materia. Ha sido un gran acierto, desconexión total, y una relajación extrema. Muy recomendable.

Es un balneario de lo peor que yo e visto y e ido a muchos,y muy bien,menos eneste mala dirección,mal ambiente ponen unas normas,y ellos mismos las saltan,no volveré nunca más al trampal, así sé llama, y es una trampa lo que nos hacen ver, no lo a consejaria a nadie,

El peor hotel que e estado en mi vida.en las habitaciones la tele en toda la semana santa no a funcionado como es posible que en temporada alta el balneario el domingo este cerrado por la tarde fuimos a utilizar lo y nos dicen que esta cerrado en las hojas de información no ponía nada la de recepción mas desagradable que desagradable las almohadas mas blandas imposible la tapa del váter rota las puertas de la mampara no cerraban estaban descolgadas. El desayuno muy cutre poco para elegir. Lo único bueno las camareras que sirven el desayuno la cena 6 primeros y 6 segundos poca calidad.muy alejado de los pueblos para poder comer o cenar en carmonita no hay para comer ni cenar

Un balneario donde disfrutar de la tranquilidad y de sus aguas ricas en hierro y termales. El personal es muy agradable y la comida buena y abundante.